El escenario escogido por Nicolás Ghesquière para presentar la colección crucero 2016 de Louis Vuitton, no me puede gustar más: Palm Springs en California, en la casa del calor americano comediante Bob Hope. La fuente de inspiración para Nicolás vino de la idea de pensar en mujeres que viven en el desierto, así vemos espectaculares vestidos de cuero largos, con definidas cinturas adornadas con tachuelas o encajes, pantalones y shorts con prints étnicos amerindios. La paleta cromática muy neutral para mimetizarse con el entorno desértico.
Según las propias palabras de Michael Burke, Presidente y CEO de Louis Vuitton, Palm Springs representa el perfecto símbolo del sueño americano y la energía de la Costa Oeste. Desde el primer momento, fuimos cautivados por el entorno. Este lugar presenta un enfoque en el que nosotros nos reflejamos: creatividad en estado puro. Simboliza perfectamente la armonía existente entre la visión de Nicolas Ghesquière y el espíritu icónico de Louis Vuitton«.
La preciosa propiedad de Dolores Hope, es conocida por su valor arquitectónico, llamado Dessert Modernism. Se asemeja a un volcán con tres grandes arcadas y tejado de suave ondulado con agujero en el centro. desde el que poder contemplar el cielo.
Un Front Row de lujo, con celebrities como la actriz francesa Catherine Deneuve y la modelo Miranda Kerr.
