No admirar el colorido de las pulseras de Frey Wille
No adorar el color celeste que envuelve todas estas joyas de Repossi, Patricia Tilsit, Van Cleff Arpels, Poiray, Gay Frères y Adler.
No enamorarse del collar Audrey de De Beers, o del colgante Galilea de Messika, o del anillo de Edouard Nahum, con diamantes blancos y negros.